El sueño de Champagnat
Carta de Marcelino Champagnat a la familia Marista de Popayán
Carta de Marcelino Champagnat a su familia Marista de Popayán
Queridos amigos:
Al cumplir el (26 de noviembre de 2009), los 120 años de presencia Marista en Popayán, les envío un saludo lleno de mi amor y preocupación por todos ustedes.
He disfrutado mucho de la Misión Educativa Marista, en vuestro Colegio Champagnat de Popayán, y he seguido con atención la labor realizada por ustedes con tanto empeño y consagración, trabajo en el que se manifiestan como auténticos educadores al estilo Marista.
Quisiera comentarles que me siento orgulloso por ver en la mayoría de ustedes maestros mi proyecto vivenciado y expresado en:
Una PEDAGOGÍA DEL ENCUENTRO, reflejada en el espíritu de sencillez y humildad que estimula la vida de familia y que se proyecta en el servicio y atención a los demás, para animarlos a seguir sembrando y cultivando los valores evangélicos.
Una PEDAGOGÍA DEL TRABAJO, reflejada en el esfuerzo, la entrega, la disponibilidad y la mística que se encuentra en ustedes, maestros, para que mi pensamiento y nuestra obra trasciendan a través del tiempo.
Una PEDAGOGÍA DE LA PRESENCIA Y EL ACOMPAÑAMIENTO, que se refleja en la preocupación permanente por reconocer los valores de los jóvenes y dinamizar su crecimiento como personas comprometidas con los cambios que necesita la sociedad actual.
Una PEDAGOGÍA MARIAL: reflejada en el servicio a los demás, y en el amor a la Buena Madre considerándola como el Recurso Ordinario y como modelo de fidelidad al proyecto de Jesús de Nazareth.
Me ha encantado mucho saber que han iniciado un nuevo sistema Institucional de Evaluación, SIE, les deseo el mayor de los éxitos y continúen prestando un servicio de calidad que responda a las expectativas de los clientes internos y externos.
Ustedes se han propuesto mejorar en la Gestión de la Calidad educativa, Identificando la Misión, la Visión, los valores y en general la filosofía institucional que se tiene y que por lo tanto son los que orientan la acción de todos los frentes del Colegio. Les deseo muchos éxitos en la preparación que están haciendo a todos los niveles para alcanzar la Certificación de la Calidad ISO 9001.
Para lograrlo es necesario que vuelvan a las fuentes del Evangelio, del Carisma Marista y a las principales corrientes pedagógicas, adaptándolas a los tiempos y a nuestro medio; formando y actualizando a toda la Comunidad Educativa, para que irradie, de manera eficaz, el Espíritu Marista y todos se sientan responsable de la Obra Marista en Popayán.
No olviden que cuentan siempre con la presencia de Jesús y María en todos sus esfuerzos, y yo estaré con ustedes en todo momento para colaborarles en esta gran obra educativa.
Los quiero mucho y mi corazón está con Ustedes.
Marcelino José Benito Champagnat Chirat
NOVENA A SAN MARCELINO CHAMPAGNAT
NOVENA A SAN MARCELINO CHAMPAGNAT
Primer día: Marcelino y el amor del Pesebre.
San Marcelino, tu veías a Jesús, el enviado del Padre, como fuente y modelo de nuestra Misión. Al ser concebido en el seno de María, el Hijo de Dios se identifica con cada uno de nosotros. Ruega por nosotros, para que estemos dispuestos a ser desprendidos y a ponernos generosamente al servicio de los demás. GLORIA AL PADRE, AL HIJO Y AL ESPÍRITU SANTO….. COMO ERA EN UN PRINCIPIO, AHORA Y SIEMPRE, POR LOS SIGLOS DE LOS SIGLOS. AMÉN. San Marcelino Champagnat, tú experimentaste durante tu vida toda clase de dificultades, y las superaste con la confianza en Dios y la protección de María Santísima, nuestra Buena Madre. Con fe sencilla ORACIÓN A SAN MARCELINO PARA TODOS LOS DÍAS
nos dirigimos a ti para que nos obtengas del Señor la gracia que hoy te pedimos (peticiones) si es conforme a su voluntad. Amén. Padre Nuestro... y Ave maría. Animador : María, nuestra Buena Madre Todos : RUEGA POR NOSOTROS Animador : San Marcelino Champagnat Todos : RUEGA POR NOSOTROS ( tres veces ).
Segundo día: Marcelino y el amor a la cruz.
San Marcelino, a menudo rezaste y meditaste ante el Crucifijo, y reflexionaste sobre cómo Jesús dio su vida por nosotros. Tú nos invitas a buscar en la Cruz el coraje, la fidelidad y un amor indefectible. Ayúdanos a seguir verdaderamente a Jesús y a aceptar todas las pruebas que se presenten en nuestro camino.
Tercer día: Marcelino y su amor al altar.
San Marcelino, tú amaste profundamente la Eucaristía y pediste a tus Hermanos que visitasen frecuentemente a Jesús en el Sagrario. Ayúdanos a amar este misterio del amor de Dios por nosotros. Que nos acerquemos a la Comunión con un amor sin fronteras.
Cuarto día : Marcelino y su amor a los enfermos.
San Marcelino, cuando estabas al servicio de las gentes de La Vallá, nada podía impedirte visitar a los enfermos : ni el mal tiempo, ni la lluvia, ni la nieve, ni las largas distancias a través de los duros senderos de la montaña. Nuestra historia comenzó en los ojos de un muchacho abandonado, que entregándose a la muerte, conmovió tu corazón.… Que tu ejemplo inspire a otras personas el cuidado a los enfermos. Ayúdanos a comprender que los enfermos pueden ser fuente de bendición para nosotros, para nuestras familias, nuestras comunidades y nuestro entorno.
Quinto día: Marcelino y su amor a los Jóvenes.
San Marcelino, tú fuiste sensible a las necesidades educativas de los niños y jóvenes de tu Parroquia. Ayúdanos a continuar tu ideal de hacer conocer y amar a Jesús, sobre todo a los jóvenes más necesitados.
Sexto día: Marcelino y su amor a la oración.
San Marcelino, tu vida nos recuerda que si el Señor no construye la casa, trabajamos en vano. Ayúdanos a mantener viva la presencia de Dios, a confiarle todo lo que hacemos, para que nuestros planes y proyectos contribuyan a la construcción del Reino de Dios.
Séptimo día: Marcelino y su amor al trabajo.
San Marcelino, tú te consagraste totalmente a la obra de la fundación y de la formación de los primeros Hermanos, y a la construcción de sus primeras casas. Eres un modelo para todos aquellos que creen en la dignidad del trabajo. Ruega por nosotros para que sepamos consagrarnos, nosotros también, al bien de los demás, y encontrar el equilibrio entre el descanso y el esfuerzo.
Octavo día: Marcelino y su amor por las Misiones.
San Marcelino, tu dijiste : « Todas las Diócesis del mundo entran en nuestras miras ». Tú nos invitas a ser audaces y a ir hacia nuevas misiones en las que los pobres esperan la Buena Noticia. Inspira a muchos jóvenes a consagrarse al servicio de los olvidados de la sociedad.
Noveno día: Marcelino y su amor a María.
San Marcelino, siempre tuviste un gran amor por María, la Madre de Jesús. La llamabas Primera Superiora de los Hermanos, y especialmente « Nuestra Buena Madre ». Ayúdanos a llevar a los demás a Jesús por María, con nuestras palabras y nuestros actos.